El algoritmo presenta un enfoque sistemático para los niños con sospecha de retraso del crecimiento. En primera instancia se debe verificar que la medición se realiza correctamente, para posteriormente calcular y registrar el percentil o z-score. A esto le sigue la correcta integración de una historia clínica detallada y un examen físico que abarque el período pre y perinatal, así como la caracterización familiar. Un niño con estatura baja o un niño con estatura normal pero con presencia de signos de advertencia debe someterse a más investigaciones. La investigación debe comenzar calculando y representando la velocidad de crecimiento (cm/año), considerando un intervalo mínimo de seis meses entre mediciones. En presencia de una tasa de crecimiento normal y en ausencia de signos de advertencia, es más probable que se trate de una causa no patológica de baja estatura, que incluye la baja estatura familiar, como el retraso constitucional en el crecimiento y la pubertad. En estos casos, el objetivo es tranquilizar a la familia y mantener un seguimiento anual del cálculo de la edad ósea y un seguimiento semestral de la velocidad de crecimiento. En presencia de baja estatura o retraso del crecimiento, asociado a una velocidad de crecimiento reducida, existe una alta probabilidad de patología asociada. Se justifica, por tanto, un estudio adicional más allá de la valoración sumaria, que englobe un estudio analítico general y un estudio analítico adecuado a la sospecha clínica. También en este caso son esenciales un examen físico específico y una historia clínica detallada. Ante una talla baja desproporcionada hay que pensar en las displasias esqueléticas. La baja estatura proporcional se puede dividir académicamente en causas prenatales y posnatales. Las causas prenatales incluyen enfermedades genéticas, como synd. por Turner y Sind. de Prader Willi y la restricción del crecimiento intrauterino. Las causas posnatales se dividen según la relación peso/talla. Las enfermedades crónicas como la celiaquía, la enfermedad inflamatoria intestinal, la enfermedad renal crónica y la desnutrición provocan una disminución de la relación peso/altura. Las enfermedades endocrinas como el hipotiroidismo, la deficiencia de la hormona del crecimiento y el síndrome de Cushing ocurren con una relación peso/talla aumentada, con peso normal o aumentado. Estos niños deben, en algún momento durante la evaluación, ser remitidos a consulta pediátrica para continuación del estudio y orientación futura.